La alquería es una vivienda típica de la huerta valenciana, vinculada con los trabajos agrarios. Originalmente aislada en medio de los campos de cultivo, la conocida como Alquería Roselló de Almàssera se encuentra actualmente insertada dentro de la trama urbana. A pesar de haber sufrido importantes modificaciones y de estar deshabitada, conservaba todo su carácter y un gran potencial.
Compuesta por una vivienda de dos plantas y dos cuerpos destinados al uso de cuadra, almacén y cambras -para el secado de productos agrícolas- este edificio se organiza alrededor de un patio, que se encontraba parcialmente cubierto por una terraza de hormigón armado. Poseía también un pequeño cuerpo adosado a la fachada principal, en el que se guardaban los aperos, y un pequeño jardín.
Después de sufrir varias intervenciones recientes que modificaron sus espacios, la rehabilitación de esta casa tradicional ha permitido devolverle su belleza original, al mismo tiempo que se acondicionaba para responder a las necesidades actuales de confort. Para ello se han respetado todos los elementos originales: la estructura y cerramientos, la volumetría, los huecos originales de fachada, las escaleras tabicadas, y los forjados de madera con revoltones. Una parte de las cubiertas, que se encontraba en muy mal estado, se ha intervenido sustituyendo las piezas de madera y reutilizando los ladrillos originales. Las coberturas se han ejecutado mediante tejas viejas reutilizadas o teja árabe nueva envejecida con textura.
Todos los materiales utilizados en esta obra son nobles, y en muchos casos recuperados. Así, se han restaurado y recolocado las rejas de forja, se ha colocado carpintería de madera, se ha pavimentado el patio con losas de piedra natural, se ha sustituido la puerta de entrada de aluminio por un antiguo portón restaurado, y se han reutilizado las puertas interiores originales.
Con el proyecto de rehabilitación de esta alquería, se ha buscado recuperar el lenguaje arquitectónico de la construcción tradicional, una sencillez volumétrica depurada tanto en interior como en exterior, crear una conexión visual y física entre el interior de la vivienda y el patio, dando protagonismo a este espacio privilegiado. Todo ello sin olvidar adecuarla a las necesidades actuales de vida, en particular la eficiencia energética.