En 1860, Miguel Nolla Bruixet, empresario originario de Reus, decide establecer en Meliana una fábrica dedicada a la producción de mosaicos cerámicos de una calidad excepcional. Esta industria será pionera en todos los ámbitos, a la imagen de su visionario fundador. Así, constituirá uno de los motores de la industrialización no solamente de Valencia, sino de España. Además, los sistemas de producción Desarrollados en ella o la abrumadora calidad de su cerámica, marcarán un punto de inflexión en la sociedad española de finales del s.XIX.
La cerámica Nolla es el primer gres producido en España. Inspirándose en la industria inglesa, Miguel Nolla consigue superar a sus modelos de referencia, produciendo un material de una calidad hasta entonces desconocida.
La resistencia mecánica de sus teselas, similar a las de los mejores mármoles de Carrara, así como su inalterabilidad a los agentes atmosféricos o químicos, hacen de esta cerámica un material que es, todavía hoy, un alarde tecnológico. Los mosaicos Nolla se componen de teselas geométricas – principalmente cuadrados, triángulos, rectángulos y rombos – monocromáticas teñidas en masa, aunque existen algunos modelos con motivos incrustados. Dichas piezas permiten una infinidad de combinaciones multicolores, tanto geométricas como figurativas. Los catálogos de la fábrica exponen dibujos de gran belleza, generalmente módulos repetibles, para responder a todas las necesidades de los clientes. Colocados pieza a pieza por hábiles mosaiqueros, conformaban verdaderas alfombras Cerámicas.
Desgraciadamente existe un desconocimiento de esta cerámica, de su inmenso valor histórico, artístico e industrial, lo cual desemboca en la rápida desaparición de las composiciones todavía conservadas. Con el fin de invertir esta tendencia, se están realizando importantes labores de estudio y difusión, una de las líneas de trabajo es el taller de mosaico Nolla.
Se desarrolla un taller enfocado a conocer mejor un mosaico muy especial, cuyo origen se encuentra en Meliana (Valencia): el mosaico Nolla. Mediante la experimentación, los participantes descubren los diseños de la empresa Nolla. Utilizando piezas de colores, recomponen los motivos geométricos de los catálogos, o inventan sus propias obras, sensibilizándose así a este patrimonio de gran valor. Se propone realizar además, una composición en grupo.
Objetivos conceptuales:
– Mostrar una visión panorámica de lo que es el mosaico
– Sintetizar y construir relaciones tonales
– Estimular las competencias aprendidas en clase como son las geometrías, las matemáticas o las composiciones
Material didáctico:
Piezas de DM de colores, bases de madera (30x30cm aprox), plantillas, ceras de colores, cola blanca.